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Granada la de los cármenes, el
Albaicin, Generalife y la Alhambra.
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| Amaneceres de ensueño; el sol buscando su encierro de tardes en los barrios de embrujo, de hechizos y de misterio. |
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Tierra de seda y nácar; de brumosa magia.
Despiadada luz que siempre roba y distorsiona la dimensión de la realidad y la
convierte en visión de belleza y esperanza.
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Difícil encontrar otras rimas que no
sean luna de fortuna, ocaso de entreluces y corazón de ilusiones.
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Pasión desbordada de sus aguas de bravura rompiendo los ecos del
silencio.
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Colorido y sabor entre aromas y
fragancias moriscas y cristianas, en sus calles de filigrana, arabesco y
fantasía.
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Vida cotidiana constantemente inmersa
en un mundo de vibraciones, en una invisible nebulosa de luz y de sensaciones
sonoras.
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Granada la de
los cármenes, el Albaicin, Generalife y la Alhambra.Tierra de seda
y nácar; de brumosa magia. Texto: Juan Diaz Casanova |
